¿Cómo
ayudo a mi hijo a tener una adecuada adaptación a clases?
El regreso a clases para nuestros pequeños engreídos puede generar nervios, temores y algunas interrogantes. ¿Cómo será mi primer día de clases?, ¿Con quién me sentaré?, ¿Dónde está mamá?, entre otros. Esto es también preocupante para las mamás que ven a sus pequeños avanzar hacia una etapa nueva de su vida, y la angustia que sienten al separarse de sus bebés. Por ello le brindaremos algunas recomendaciones para que usted pueda saber manejar la situación con mucha cautela, que puedan ayudar a reducir la ansiedad por separación.
1.
Despídete
al momento de dejarlo y recuérdale que volverás.
Es recomendable brindarle seguridad de que volverás por él. Este
primer paso es muy importante para que el niño no tenga temor de que lo
abandonarás. Al contrario, vendrás por él después de terminar las clases.
Mientras tanto explícale que él va a aprender cosas nuevas con más amiguitos de
su edad y sobre todo tendrá una profesora amorosa que le ayudará y enseñará a aprender
cosas nuevas de una manera muy divertida.
2.
Procura
que las despedidas sean rápidas. Eso le trasmitirá seguridad y confianza.
Mientras más tiempo te quedes en la despedida, mayor angustia
generarás en tu pequeño. Es por ello que al momento de dejarlo en su salón de
clases es recomendable brindarle seguridad al marcharte y ser muy determinada.
Esto será muy difícil para ti como mamá, pero es necesario para que el niño
entienda que no es tan grave la situación y pueda confiar en sí mismo adaptándose
poco a poco a la situación.
3.
Llega
un tiempo antes del inicio de clases; esto le permitirá jugar libremente y
vincularse con sus compañeros y profesoras.
Este paso es necesario, sobre todo para el primer día de clase. Es
muy importante llegar antes de la hora indicada, para que tu pequeño pueda
conocer el lugar en dónde estará y también pueda ir familiarizándose con su
profesora y sus compañeritos. Este pequeño espacio hará que el pequeño se
sienta más cómodo y calmado en este nuevo lugar que es un nuevo mundo ante sus
ojos. Dale la confianza de explorar su salón de clase, para que pueda ir
afrontando sus miedos y logre reducir la angustia.
4.
Involúcralo
para elegir su mochila, lonchera y útiles escolares. Eso lo hará sentirse
motivado.
Al momento de las compras de los útiles escolares, todas las
mamitas tenemos el estrés por la gran lista de útiles que solicita el colegio.
Sin embargo, disfrutamos al elegir qué marca de cuaderno o qué modelo de
mochila usará nuestro chiquitín. Esto no es malo, pero podría ser mejor. Te
pongo un ejemplo: Al comprar la mochila de tu niño, elige 3 opciones de tu
preferencia y según tu economía claro está, hazlo elegir qué modelo le gusta
más y lo hace sentir más feliz.
5.
Explícale
el tiempo que permanecerá en el colegio. Así tendrá una idea clara de cuánto
tiempo estará ahí.
Muchas veces, pensamos que nuestro bebé no entiende lo que le
decimos, porque son muy pequeñitos, pero esto es realmente falso. Ellos
comprenden y se dan cuenta de la situación. Por tanto, es importante hacerles
entender con claridad el tiempo que estarán en su salón de clases, y también
compartirles qué harás tú en ese tiempo de ausencia.
6. Dibuja un corazón en su mano y otro en la tuya. Esto le hará
sentirte cerca.
Esta idea es muy creativa y significativa para ellos, ya que ellos
entienden de una manera más pura e inocente el amor y cariño de sus mamitas. Al
momento que ya no estés acompañándolo y él empiece a extrañarte, te aseguro que
verá el corazón y le dará mayor calma.
6.
Valida
sus emociones y miedos. Escúchalo con empatía
Nuestros pequeños son muy sensibles y no saben manejar aún sus
emociones como un adulto. Es por ello, que cuando no se sienten seguros en un
lugar suelen llorar desesperadamente o hacer rabietas, cómo tirarse al piso, o
gritar tirando cosas al suelo para llamar tu atención. Tienes que ser muy
paciente con ellos, pregúntale qué siente y por qué está reaccionando de esa
manera, qué no le agrada y cómo podría ayudar a solucionar el problema. No
obstante, no olvides que es importante poner reglas en casa, para que cuando
vayas a algún lugar externo, pueda respetar lo que ya se le había enseñado.
7.
Permítele
llevar un juguete u objeto favorito eso le brindará seguridad, ya que mantendrá
un vínculo con su casa.
Esto les encantará, permíteles desde la libertad escoger su
juguete favorito de casa, para que lo acompañen mientras tú no estés. El objeto
lo asemejará con la mamá, que será quien lo acompañe cuando ella no se
encuentre, así se sentirá más seguro de sí mismo.
9. Trata que sea la misma persona quien lo acompañe y recoja. Eso
le dará constancia y seguridad.
A muchas mamitas se les dificulta este paso, ya sea por falta de
tiempo o algunos inconvenientes que se nos presentan en el día a día. Pero es
recomendable, tratar que un cuidador venga la mayoría de veces a recogerlo, ya
sea mamá/ papá o algún otro cuidador cercano a la familia. Así podrá tener
mayor confianza de quedarse en su nuevo salón de clases.
10. Evita llegar tarde a dejarlo o recogerlo.
Cuando tenemos un hijo, toda nuestra vida da una vuelta de 360º,
nos esforzamos por darles lo mejor de lo mejor. Es por ello, que si deseamos
que ellos sean personas de valores y principios saludables, el mayor ejemplo de
modelo de imitación son los padres. Por tal motivo, debes evitar llegar tarde a
recogerlo, para evitar la angustia que genera a tu pequeño al no ver que has
cumplido lo que dijiste al inicio y pensar que nadie vendrá por él.
11. Cuando llegue a casa dedícale tiempo para conversar sobre su
día.
Claro que esto es muy importante, a todo chiquitín le encanta que
le mamá pueda preguntarle cómo fue su día y qué hizo. Por ello, es muy bueno
escucharlo y empatizar con sus emociones. No olvides felicitarlo por lo
valiente que fue en su primer día de clases, y llenarlo de besos y abrazos para
reforzar su autoestima y su relación.
Y lo más importante...
Recuerda que cada niño tiene un
proceso diferente. Respétalo, acompáñalo y bríndale atención y mucho amor.